lunes, 31 de agosto de 2009

San Martín Perdonará a los Kirchner ?

Perdónalos general, no saben lo que hacen.
Perdónalos general Jose de San Martin, no saben lo que hacen. Estan ciegos de odio y venganza. Son tan torpes que son capaces de humillar la figura del padre de la patria por una chicana revanchista de la política minúscula.
Perdónalos general San Martin.
Creen que el estado es de su propiedad. Que los helicópteros le pertenecen. Que la quinta de olivos es una unidad basica. Yo se que es demasiado. Que han superado todo tipo de límites y de sentido común metiendo en una interna política la figura que mas admiramos, la que mas nos identifica, la que todos queremos desde el fondo de nuestra niñez, de nuestro corazón y de nuestros sueños revolucionarios.
Perdónalos general San Martin, los Kirchner no saben lo que hacen. Se creen muy vivos castigando al vicepresidente Cobos y no hacen otra cosa que castigarse a sí mismos con la indignación que han generado. Otra vez Néstor, aturdido por el enojo ordena cosas absurdas y mezquinas que se le vuelven en contra. Que siguen levantando bronca contra sus actitudes incomprensibles.
Perdónalos general, no saben lo que hacen.
No dejan celebrar en paz ni tu nacimiento. Ni siquiera en tu lugar de nacimiento, en ese pueblo de Nuestra Señora de los Tres Reyes Magos de Yapeyú. Creen que vale todo a la hora de hacerle daño al rival o al adversario político. Lo transforman en un enemigo y son capaces de hacer cualquier cosa. Pero meterlo a usted, general San Martin…., es una herejía, una falta de respeto a su memoria, a la historia de todos los argentinos.
¿Qué tiene que ver el Santo de la Espada con estas diabluras? ¿Cómo pueden cometer una torpeza del tamaño de la cordillera de los Andes que San Martín cruzó en mula y en camilla en la mas grande epopeya americana que se recuerde ?. Estamos hablando de un prócer que como primer acto de gobierno garantizó la libertad de prensa. Jamas quiso concentrar poder. Se preocupó por tener una justicia independiente. ¡ Cuanto deberían aprender de usted ,General¡. Por eso le pido que los perdone. San Martín…. por si no lo saben ejercía su autoridad con mucha firmeza. Pero daba el ejemplo con su coraje y austeridad. Decía que la educación era el mas poderoso ejercito para defender la independencia. En una carta que le mandó al caudillo Estanislao Lopez que bien valdria la pena leer con nuestros hijos le escribió: Divididos seremos esclavos.
Justo hoy que estamos tan divididos, tan fracturados como sociedad. ¿Sabe el doctor Kirchner que San Martin le hizo quemar a su esposa Remedios fastuosos vestidos porque decia que ese lujo no era digno de un militar.? Era austero hasta los huesos. Honesto hasta la obsesión. Manejó muchísimos fondos públicos y murió sin un peso, en el exilio y se negó a todo tipo de funerales.
Es nuestro padre de la patria y no merecía una desprecio semejante. Sus granaderos del alma por primera vez no estuvieron donde todo el pueblo cree que deben estar. En su tierra, general. San Martín, usted que es el argentino mas grande y admirado de todos los tiempos comprenderá a los irracionales. Por eso le pido: Perdónalos general,no saben lo que hacen.
Usted todavía vive en el corazón de los argentinos. Es el Padre de la Patria y sus hijos debemos honrar su memoria. Respetarlo siempre. Ojalá nosotros, sus hijos podamos construir una patria a su imagen y semejanza. Con sus valores democráticos, su valentía, su honestidad y su patriotismo


Por primera vez consecutiva he decidido compartir un texto del mismo autos, en este caso de Alfredo Leuco, la verdad me pareció brillante.

Andaba yo escribiendo y preparando un texto, casi un ensayo sobre la justicia y la opinión publica, pero quedará para otra oportunidad.

jueves, 13 de agosto de 2009

SERÁ JUSTICIA

El Negrito era un negrito de apenas 14 años. Simpático, entrador y un militante aguerrido que jamás tuvo un arma en la mano. El negrito estaba orgulloso de su viejo que era afiliado al Partido Comunista, delegado de una fábrica textil de la zona norte y se llamaba igual que él: Floreal Avellaneda. Aquel horroroso 15 de abril de 1976, a la una y media de la madrugada, ocho autos llenos de asesinos con uniforme se metieron en la humilde casa de la familia Avellaneda. Entraron a sangre y fuego. Ametrallaron la puerta y robaron todo lo que pudieron. El viejo Floreal había conseguido escaparse y los tenebrosos pasajeros de los Ford Falcon sin chapa, encapuchados, se llevaron al negrito y a Iris, su mama. En la comisaría de Villa Martelli los torturaron con ferocidad y alevosía. Iris sufría cada vez que la picana eléctrica se clavaba en su vagina mojada y gritaba con desesperación. Pero su mayor sufrimiento era escuchar los gritos de su hijo, el negrito Avellaneda que decía: “Mami, deciles que no sabemos a donde se fue Papa”. Lo cuento y me corre un frío terrible por la espalda. Me estremezco porque ese chico valiente de 14 años fue sometido al empalamiento. No quiero apelar a un golpe bajo. Pero creo que el salvajismo inhumano debe conocerse en toda su dimensión para que Nunca Más sea posible. El empalamiento es uno de los mecanismos de tortura más atroces y consiste en atravesar a la persona con una madera filosa entre la boca y el ano. Un asesinato de nazis cavernícolas. Eso hicieron con el negrito de 14 años. Así asesinaron a un pibe de barrio indefenso. Su madre fue trasladada a la cárcel de Olmos y el cuerpo del negrito apareció flotando junto a otros 7 cadáveres en el río de la Plata frente a las cosas de Uruguay. Lo reconocieron porque tenía tatuado un corazón con las letras F y A adentro. No hay palabras para calificar semejante alevosía.
Treinta y tres años después, la justicia de la democracia hizo justicia. Santiago Omar Riveros, comandante de Institutos Militares de Campo de Mayo fue condenado anoche a prisión perpetua. Va a pasar el resto de sus días encerrado. Ese es el lugar en donde un terrorista de estado debe estar: en la cárcel. Nadie sabe donde están los restos del Negrito. Porque su cuerpo fue robado de un cementerio en 1979. Semejante ensañamiento degrada la condición humana. No podían soportar ni siquiera el cadáver destrozado de Floreal Avellaneda. Nombre de tango perfumado y apellido de ciudad proletaria. Tristeza y lamento de blues para el Negrito Avellaneda que ojalá descanse en paz escuchando el desgarro de Manal como un rezo y una letanía: Vía muerta, calle con asfalto siempre destrozado. Luz que muere, la fábrica parece un duende de hormigón. Y la grúa su lágrima de carga inclina sobre el rock.


TÍTULO ORIGINAL DE LA NOTA: "AVELLANEDA BLUES"
ALFREDO LEUCO (radio continental jueves 13.08.09)


Periodista. Actualmente es columnista en Radio Continental en el programa que conduce Fernando Bravo de 13 a 17 horas. Conduce “Le doy mi palabra” por Canal 26 todos los martes desde las 22.30 horas. Premiado con el Konex 2007 al mejor analista político audiovisual de la década. Fue nominado en 7 ocasiones para el Martín Fierro como mejor labor periodística entre el cable y la televisión abierta. Escribe una columna semanal en el diario Perfil. Tiene 3 libros publicados.Trabajó durante 11 años en el diario Clarin y fue jefe de redacción de El Cronista y subdirector de las revistas Somos y Gente. Fue conductor de Latidos por Telefe, Fuego Cruzado y columnista en Informe Central, La Cornisa y America Noticias. También trabajo en radio La Red, Del Plata y se inicio en el diario Córdoba